POEMA
Ignoro si esta sangre aquí vertida
es un llanto que cae
desde los ojos que tuvimos antes,
cuando daba la tierra
sus brotes, sus fogatas de alegría.
Rojo abultado, carmesí violen to,
un redondel que nos contiene a todos,
el charco en que se embebe nuestro tiempo.
En su líquido flotan
las humosas esquirlas
de ese mundo que amábamos.
Flotan también los desligados soles
que bajan para hacernos compañía.
Nos reunimos en torno
de esta sangre común no coagulada
sin saber cuántos días
estaremos mirándola y mirándonos.
Acaso se evapore, acaso quede
en su sitio la flor que componemos,
la última flor humana
hecha de carne abierta,
de amor también abierto, y sin salida.
MARÍA GRANATA
Nota: El texto seleccionado fue tomado del Suplemento “Clarín cultura y nación”, Diario Clarín, Buenos Aires, 23 de Julio de 1981.
No hay comentarios:
Publicar un comentario