LA TÍA TERESA
La Payén anunció un concurso de fotogenia. Se busca otra cara para una nueva película. La otra, “La Chacra de Don Bautista”, fue suceso. Nosotros anotamos a la Teresa.
La verdad que la tía Teresa tiene una voz de pito pero si gana no va a haber problema porque la película es muda, dijo mamá. La verdad que la tía Teresa no sé si sirve de actriz pero la verdad que es muy buena para llorar en los velorios y siempre la convidan, dijo papá. Con ese pelo tan raro que tiene y cuando se pone ruleros y se peina le queda lindo todo, dijo el tío Mario. La verdad que tendría que subirse un poco más el tono, dijo la tía Azucena. La tía Teresa tiene lindas manos, remarcó mi hermana Gladis, y las manos son el alma del cuerpo. Yo creía que el alma eran los ojos, dijo mi hermana Berta, la menor. Su alma será siempre inmortal, dijo la abuela Presunta, si es por lo que hace. Las actrices son todas iguales, se la pasan todo el día pintadas y reclinadas, agregó el abuelo Juan. La verdad que la tía Teresa no hace nada pero nada de nada de la casa, dije yo. Y me pegaron un bofetón.
La Payén perdió las máquinas en el incendio del cine Ocean, no hicieron la película y nosotros nos quedamos sin saber qué fue del resultado de aquel concurso y tuvimos que contentarnos con una actriz de entre casa.
La verdad que la tía Teresa también tiene su lado bueno, pienso. Pero ya no opino.
De “Bonsai en compota” (2014)
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